Desarrollo Sustentable
2.1 El ecosistema.
(2015, 11 de septiembre). Wikipedia
Un ecosistema es un sistema natural que está formado por un conjunto de organismos vivos (biocenosis) y el medio físico donde se relacionan (biotopo). Un ecosistema es una unidad compuesta de organismos interdependientes que comparten el mismo hábitat. Los ecosistemas suelen formar una serie de cadenas que muestran la interdependencia de los organismos dentro del sistema.1 También se puede definir así: «Un ecosistema consiste de la comunidad biológica de un lugar y de los factores físicos y químicos que constituyen el ambiente abiótico».
Este concepto, que comenzó a desarrollarse entre 1920 y 1930, tiene en cuenta las complejas interacciones entre los organismos (por ejemplo plantas, animales, bacterias, protistas y hongos) que forman la comunidad (biocenosis) y los flujos de energía y materiales que la atraviesan.
Para Krebs (2001) la definición de ECOSISTEMA reviste especial significado en cuanto a la ecología humana, mientras que para Odum (1998) deviene necesaria porque permite discernir los tipos de energía de los que dependen los ecosistemas. Explica que “los ecosistemas dependen de dos tipos principales de energía: la solar y la producida por combustibles químicos (o nucleares), de tal modo que es posible distinguir de sistemas impulsados por el Sol e impulsados por combustibles…” “Estos dos tipos de energía son básicos para entender la interacción entre el ser humano y los ecosistemas. Esto a su vez según Marten (2001), se clasifican en tres grandes tipos: ecosistemas naturales, ecosistemas agrícolas y ecosistemas urbanos.
El Ecosistema es la unidad de trabajo, estudio e investigación de la ecología. Es un sistema complejo en el que interactúan los seres vivos entre sí y con el conjunto de factores no vivos que forman el ambiente; temperatura, sustancias químicas presentes, clima, características geológicas, etc. (Echarrí 1998).
Dicho de otra manera, los ecosistemas son sistemas complejos como el bosque, el río o el lago, formados por una trama de elementos físicos (el biotopo: es el sustrato no vivo del ecosistema, es el conjunto de todos los elementos abióticos “no vivos”), y biológicos (la biocenosis o comunidad de organismos: conjunto de seres vivos de un ecosistema). Es decir, el ecosistemas estudian las relaciones que mantienen entre si los seres vivos que componen la comunidad, pero también las relaciones con los factores no vivos.
El ecosistema magno es la ECOSFERA. Abarca todo el planeta y reúne a todos los seres vivos en sus relaciones con el ambiente no vivo de toda la TIERRA. Pero dentro de este gran subsistema que son ecosistemas más delimitados. Así, por ejemplo, un océano, un lago, un bosque, incluso un árbol o una manzana que se esté pudriendo, son ecosistemas que poseen patrones de funcionamiento en los que se puede encontrar paralelismos fundamentales que permiten agruparlos en el concepto de ecosistema.
Para que funcionen, todos los elementos necesitan una fuente de energía que, fluyendo a través de sus distintos componentes, mantiene la vida y moviliza el agua, los minerales y otros componentes físicos del ecosistema.
Dos son las fuentes de la sustantivas de energía, como ya se mencionó, de las que depende el funcionamiento del ecosistema: 1) La energía solar y 2) La energía producida por combustibles químicos, de tal modo que es posible distinguir entre sistemas impulsados por el sol y los impulsados por los combustibles. Con base en esta distinción energética, el ecosistema se clasifica en:
1.- ECOSISTEMA NATURAL no subsidiados impulsados por energía solar. Ejemplos: el piélago y los bosques de zonas altas.
2.- ECOSISTEMA NATURAL subsidiado impulsados por energía solar. Ejemplos; estuario de marea y algunas selvas tropicales.
3.- ECOSISTEMAS HUMANOS subsidiados impulsados por energía solar. Ejemplos; agricultura y acuicultura.
4.- SISTEMAS URBANOS-INDUSTRIALES impulsados por combustibles. Ejemplos; ciudades satélites y parques industriales.
Intrínseco a este funcionamiento existe, además, un movimiento continuo de los materiales. Desde el punto de vista del ecosistema, se distinguen dos componentes bióticos; aquel que es capaz de captar energía luminosa y utilizarla para elaborar alimento, mediante síntesis, a partir de sustancias inorgánicas denominado componente autotrófico, y el que degrada, asimila y desintegra las sustancias orgánicas requeridas en los procesos vitales, llamado componente heterotrófico, que emplea las sustancias elaboradas por los autótrofos.
De una u otra manera los diferentes elementos químicos pasan del suelo, el agua o el aire a los organismos, y de unos seres vivos a otros, hasta que vuelvan al suelo, al agua o al aire para cerrar el ciclo. En este mismo sentido la materia se recicla — en un ciclo cerrado — y la energía pasa — fluye– generando organización al sistema.
La identificación de un ecosistema se hace con el propósito de descubrir las relaciones entre los elementos, más por el interés de explorar cómo son éstos. Para el estudio del ecosistema es indiferente, en cierta forma que el depredador sea un león o un tiburón. La función que cumplen dichos elementos en el flujo de energía y en el ciclo de los materiales es similar, y es lo que interesa en ecología. Ahora bien, como sistema complejo que es, cualquier variación en un componente del sistema repercutirá en todos los demás componentes. Por eso, es tan importante identificar las relaciones que se establecen, las cuales son: alimentarias, los ciclos de la materia y los flujos de la energía.
¿Por qué es importante comprender el concepto de ecosistema?
El concepto ecosistema ofrece una de las claves de la ciencia de la ecología: todo se relaciona con todo. La percepción diaria muestra que el mundo se compone de distintas unidades: arboles, rocas, animales, edificios etc. Sin embargo, todos estos fragmentos aparentemente desconectados son, de hecho, parte de un sistema; todos los componentes están interrelacionados y esta interrelación es esencial para la vida. Debido a que no existe una pieza independientemente de otra, ninguna puede ser modificada sin afectar a las otras. Esta idea es la que subyace en el termino “ecosistema”.